La alimentación y los probióticos son aliados muy potentes para mantener el equilibrio íntimo, la salud vaginal y el bienestar sexual, especialmente durante y después de la menopausia.
Los cambios hormonales pueden alterar el pH, la microbiota vaginal y la lubricación, pero con una buena dieta y los probióticos adecuados se puede prevenir la sequedad, infecciones y molestias.
Microbiota vaginal: un ecosistema protector
La microbiota vaginal está compuesta principalmente por Lactobacillus, bacterias beneficiosas que:
- Mantienen el pH ácido (3.8–4.5).
- Inhiben el crecimiento de hongos y bacterias patógenas.
- Favorecen la lubricación y la sensación de confort.
Con la menopausia, al bajar los estrógenos, los lactobacilos disminuyen y aumenta el riesgo de:
- Sequedad o picor.
- Infecciones urinarias o vaginales recurrentes.
- Mal olor o flujo alterado
Probióticos: restaurar y mantener el equilibrio íntimo
Son microorganismos vivos que, al administrarse en cantidades adecuadas, benefician la salud del huésped.
En este caso, refuerzan la microbiota vaginal y digestiva.
Cepas más estudiadas para salud íntima femenina
- Lactobacillus rhamnosus GR-1
- Lactobacillus reuteri RC-14
- Lactobacillus crispatus
- Lactobacillus gasseri
Estas cepas:
✅ Restauran el pH vaginal.
✅ Previenen infecciones bacterianas o por cándida.
✅ Mejoran la humedad y el confort vaginal.
✅ Apoyan el efecto de los estrógenos locales y los hidratantes vaginales.
Alimentación: tu primera herramienta para el equilibrio íntimo
Durante la menopausia, la caída de los estrógenos modifica el pH vaginal y reduce las defensas locales.
Una alimentación equilibrada puede reforzar la microbiota vaginal y mejorar la producción natural de lubricación.
| Nutriente | Dónde encontrarlo |
Beneficio íntimo |
| Fitoestrógenos (isoflavonas) | Soja, tofu, tempeh, lino, sésamo, legumbres | Ayudan a compensar la caída de estrógenos, mejoran lubricación y elasticidad. |
| Ácidos grasos omega-3 | Pescados azules, chía, nueces, aceite de linaza | Antiinflamatorios, mejoran la circulación genital y la hidratación de mucosas. |
| Vitamina E | Aceites vegetales, almendras, aguacate | Antioxidante; protege las mucosas y ayuda a mantener la lubricación. |
| Vitamina C | Frutas cítricas, kiwi, pimientos | Favorece el colágeno y la integridad de los tejidos vaginales. |
| Zinc y selenio | Semillas, mariscos, cereales integrales | Mantienen la inmunidad y la salud de la piel y mucosas. |
| Agua | 1.5–2 L/día | La hidratación es esencial para la lubricación natural. |
💡 Evita en exceso: azúcares refinados, alcohol, ultraprocesados y grasas trans, porque alteran la microbiota y favorecen infecciones.
Sinergia alimentación + probióticos + estilo de vida
Para potenciar los resultados:
- Mantén una dieta rica en fibra y prebióticos (plátano, avena, ajo, cebolla) para alimentar los lactobacilos.
- Evita duchas vaginales o jabones agresivos.
- Usa ropa interior de algodón y evita humedad prolongada.
- Practica actividad física regular (mejora la circulación pélvica).
CONSEJO DE TU GINECÓLOGO
Una combinación de:
- Buena alimentación (antioxidantes + fitoestrógenos + omega-3)
- Hidratación adecuada
- Probióticos específicos para la microbiota vaginal puede:
👉 Prevenir sequedad, infecciones y malestar.
👉 Mejorar el confort, la lubricación y el placer sexual.
👉 Potenciar los efectos de tratamientos médicos o regenerativos.

DR. EDUARDO PANDIA ESTRADA
MÉDICO GINECÓLOGO-OBSTETRA
ESPECIALISTA EN GINECOLOGIA REGENERATIVA, ESTÉTICA Y FUNCIONAL
ESPECIALISTA EN MICROBIOTA Y DISBIOSIS VAGINAL
ESPECIALISTA EN TERAPIA HORMONAL INTELIGENTE





